Trabajo original de este nuevo creador gallego. Obra peculiar de sello propio que se mueve por lo volumétrico, aún partiendo de una superficie plana. Geometrías al servicio de la figuración realista y próxima a cierto expresionismo…

El nuevo expresionismo realista articulado en torno al cubismo determina sus resoluciones plásticas, que tienen como tema central la figura humana que llenan prácticamente el cuadro. Seres que se desenvuelven en la vida diaria o bien se concretizan en personajes históricos o legendarios (Napoleón, Cristo, El Quijote, Las Meninas…).

Hombres y Mujeres abigarrados de formas exuberantes, macizos, totémicos, de rasgos pétreos que nos remiten a relieves tridimensionales de monumentos (entre otros de pueblos precolombinos: totenecas, toltecas, mexicas… el románico gallego…) e incluso a obras de creadores como BOTERO, o bajorrelieves en terracota de nuestro paisano JOSE ANTONIO CASTRO…

Los rostros en sus trabajos se repiten de unos temas a otros, casi la misma mirada, el mismo rictus, quizás para recordarnos que sus figuras se ocultan tras máscaras opacas que nos traslucen sentimientos, que se autoprotegen de su debilidad y fragilidad.

Figuras amazacotadas, en actitudes cotidianas, compactos, fuertes de mensaje claro y determinante, de texturas y colores apropiados para resaltar poses, miembros (brazos y piernas) poderosos. Duros, imperecederos, como expectantes… Cierta ironía impregna sus creaciones.

Mounstros queridos, a veces, sarcásticos, simpáticos, irreductibles, broncos y ásperos…, que encierran en sí, la cosmogonía que alienta las inquietudes de RAMÓN ASTRAY.

RAMÓN ASTRAY es un joven pintor autodidacta que le abala un apretado currículo ex posicional…Su muestra en Ciudad Real es otra mirada sobre la humanidad, donde lo arquetípico, surrealista, lo etnológico, mitológico y referencial, constituyen en cierto modo retazos de aquellas impresiones antropológicas que con su carga emotiva, sensitiva…, subyacen o moran más allá de la consciencia…, y en este caso, aparte de lo meramente sensorial…, en los compartimentos sentimentales de RAMÓN ASTRAY.

JOSÉ GONZÁLEZ ORTIZ.
Lanza, junio de 2004.